Je suis fatigué

Cansada estoy de tanto darle a los idiomas. Cansado estoy de relacionarme a través de una pantalla. Cansadita, pero contenta de estar en otro país dandole vueltas a la cabecita día y noche. Cierto es, cierto será... Que, mi querida Grillo, tienes toda la razón del mundo cuando dices que hay que salir, que meerece la pena vivir en otra ciudad, y que cuando regresas a casa por Navidad te das cuenta que prácticamente todo sigue igual. Las cosas no han cambiado y aunque te has perdido algunos momentos, las cosas que merecen la pena se siguen conservando. Es preciosa la lejanía del hogar y de la familia, de ver como la realidad sigue en la cabeza y simplemente es el espacio y el tiempo lo que cambia. El relativismo se vuelve mucho más relativo cuando estás fuera de España. Y, te das cuanta que el mundo es tan pequeño como un sacapuntas. A mi el tiempo me tiene un poco secuestrada, como en un bote de formol. Y, aprovechando ha salido la palabra formol (y que el Pisuerga pasa por Valladolid) Grillito, parece que nos han echado un poco (del formol este) en la cara. Dicen que la felicidad rejuvenece 5 años (lo tengo comprobado), poque aquí, en Ginebra, cada vez que digo mi edad se tienen que recoger el ojo de la cara y ponerse de nuevo los palos del sombrajo. Pero, claro, esto no se lo puedo traducir en toda su esencia, ni tan siquiera a medias.

Bona nit... Bonne suare... Bon nuit... Good Night... Buenas noches y hasta mañana compañera...